El Real Madrid Teka se ha impuesto al Olympiacos de El Pireo, en el Pabellón de la Paz y la Amistad de la ciudad griega, por 73-79, en partido correspondiente a la jornada 28 de la fase regular del Top 16 de la Euroliga de baloncesto.
Fue un triunfo sin alegrías ni alharacas, logrado a base de trabajo duro y de profesionalidad. Cierto es que Anthony Randolph nos deparó varias intervenciones espectaculares (hasta cuatro tapones puso el californiano), y se adornó en una transición con un mate de espaldas, pero esa no fue la tónica del partido.
Olympiacos se empeñaba en que el Madrid no corriera, era su única posibilidad. Además, de inicio, no supimos cerrar el rebote defensivo (8 nos quitaron los griegos en el primer cuarto), con un Milutinov jugando su mejor encuentro de Euroliga, que le posibilitaría marcharse al minuto 40 hasta los 24 de valoración. Al parcial de 8-0 de los locales, respondimos con un 0-5, que equilibraba el marcador al minuto 10 (20-19).
El segundo cuarto fue de Anthony Randolph, que ya no se bajaría de su gran momento en todo el encuentro. Tres gorros seguidos, más el mate de espaldas antes mencionado pusieron sobre la mesa las cartas del Madrid, que estaba dispuesto a romper su mala racha como visitante en este escenario. Un día más, no estábamos acertados en el triple, con un 3 de 9, a pesar del que anotó Tompkins viniendo en carrera desde lo alto de la bombilla. También mostró sus cualidades Otello Hunter, que volvía a la que fue su casa, en la que fue bien recibido. Al descanso, empate a 37, con el Madrid logrando 11 puntos al contraataque. En el debe, nueve balones perdidos y 10 rebotes ofensivos de los griegos.
Lo primero que nos sorprendió del tercer cuarto fue la vuelta de Loncar al tema de la multa a Tomic por su agresión a Carroll. Era la enésima vez que lo comentaba, y no parecía ni el momento ni el lugar para volver a hacerlo. Comenzó bien Olympiacos, yéndose 6 arriba, con tres triples casi seguidos, apenas contestado por otro de Taylor, aplicado un día más en labores defensivas sobre Spanoulis. Se volvieron a equilibrar las fuerzas, y nos dio la impresión de que, un día más en tierras lejanas, el arbitraje se empezaba a inclinar peligrosamente del lado local. Pegó un tirón Sergio Llull al marcador (52-56) a dos minutos del final, mientras le cayó la cuarta a Ayón, que no está atravesando su mejor momento, y que se marchó aplaudiendo al árbitro. Le pudo caer la técnica perfectamente. Minuto 30, 54-58.
Supo el Madrid mantener la distancia en el último cuarto. Anotó Randolph a la media vuelta el punto 64 del Madrid, llevando el silencio a las gradas. Hunter jugó muy buenos minutos, con los nuestros sabiendo leer muy bien los cambios en la defensa contraria. Dimos vida a Olympiacos con dos ataques seguidos fallados, apareció Spanoulis, 5-0 en contra (73-77), pero la suerte estaba echada. El Madrid, muy profesional, supo sacar adelante el partido. Seguimos líderes una semana más, y con el equipo recuperándose del bache de las últimas semanas. Dos victorias muy importantes en Euroliga, con Randolph (30 de valoración) brillando a gran altura, con Llull de escolta, y Otello y Maciulis, y Tompkins y Luka. Deben seguir mejorando Carroll y Felipe, y sobre todo Rudy, que a pesar de su mal momento está sabiendo aportar al equipo, signo inequivoco del baloncestista enorme que es. Buenos minutos de Draper, que volvió a tener minutos, justificando su presencia en el equipo.
Fin de los viajes por el momento. Quedan dos jornadas, ambas en el Palacio, ante Fenerbahce y Efes. Veremos ambas con la tranquilidad de tener los deberes hechos.
Buenos días a todos. HALA MADRID.
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